MUJERES LIDERESAS EN LA PARTICIPACIÓN SOCIAL

Grupo de mujeres de apoyo mutuo. Xarxa d’Escoletes Infantils de Casa Caridad.

Norlis Judith Herrera Valdés de la localidad de San Onofre y Rosina Martínez Ochoa, de la localidad de San Bravo Bolívar.

Compartiendo Ondas nos habla de mujeres importantes en nuestras vidas, mujeres que participan en la comunidad social, mujeres lideresas que defienden los Derechos de las Mujeres y por tanto los Derechos Humanos.

Agradecemos a todas estas mujeres valientes que se han expresado en Compartiendo Ondas, espacio de conexión con nosotras y con las otras:

Loveth, con su interpretación de la canción Sweet Mother “Dulce Madre”, apoyando en la traducción de Divine y Evelyn.

Safae y Joy, que nos aportan sus más grandes lideresas, sus madres. El espacio se llama Mi madre y yo.

Las compañeras de Colombia nos van a contar si experiencia como lideresas de Derechos Humanos, Rosina Martínez y Norlis Herrera.

Jaspreet y Fatine, responden “¿Quiénes somos las mujeres? “.

Luisa y Sandra nos hablará de Aguas Santas Ocaña Navarro.

Chahrazad y Salma nos aportarán quién es Aixa Xena, trabajadora social en Marruecos.

Cheri nos contará cómo Concha, su maestra le ayudó a cambiar y mejorar.

Laura nos acerca a la gran dimensión de una lideresa argentina: Hebe Bonafine.

Y nosotras somos las presentadoras Hebe y Dalila, que os acompañamos a lo largo del Compartiendo Ondas: MUJERES LIDERESAS EN LA PARTICIPACIÓN SOCIAL.

Play y compartiremos buenas ideas

Dulce madre, no voy a olvidarte, por el sufrimiento que tienes por mí.

Cuando quiero dormir, mi madre me ayuda y me acompaña a la cama. Ella me cubre, y me dice: duerme, duerme mi hija.

Cuando estoy enferma mi madre llora, y quiere que me cure, y dice: yo moriría por ti.

Cuando lloro, me acompaña, y siempre está a mi lado, y me dice dulce: Calma, no llores más.

Cuando tengo hambre, ella siempre encuentra algo para mí.

Ella siempre me ayuda, para descansar, para comer, para soñar… 

Nunca podré olvidarte. 

Te quiero. 

De un pueblo pequeño sin opciones de trabajo ni estudios, mi madre ha sabido tener constancia y estudiar con muchas dificultades, hasta que ha conseguido un trabajo en el ayuntamiento de la ciudad, incluso comprar su propia casa y realizando toda la atención a la familia.

De ella he aprendido que hay que seguir, aprendiendo, no abandonando, y cada vez se va a más. Ahora tengo más energía para reconocer las oportunidades que podemos encontrar participando en la asociación.

Mi madre no lo tuvo fácil. Solo podían estudiar los hombres, y tuvo que ir a trabajar al campo. Es una mujer con mucha energía y con mucha alegría para hacer las cosas. Algunas veces iba con ella, y cultivamos cacahuete, yemba, coco y lentejas.

Pero hoy mi madre no está conmigo, mi madre fue asesinada, y por ello hemos sufrido mucho. Yo soy la única hija, junto a mis cinco hermanos. Ella murió con 55 años, y no ha podido ver cómo nosotros hemos mejorado y estamos en España. La echo mucho de menos y me hubiera gustado mucho poder disfrutar juntas de todo lo conseguido.

Un saludo desde el municipio de San Onofre. Soy Norlis Judith Herrera Valdés, y en relación a las ideas fundamentales sobre la participación social de las mujeres, somos las promotoras de los Derechos Humanos,  y buscamos terminar con la violencia basada en género.

Por ello somos mujeres activistas y feministas, somos emprendedoras, hábiles y soñamos, soñamos de todo.

Para nosotras no hay barreras, siempre estanos ahí, para resolver cualquier cosa que pueda pasar.

En nuestro contexto de Colombia, se una mujer lideresa es ser una mujer “verraca” es decir una mujer que busca cambiar realidades y transformar. Siempre está gestionando y trabajando en equipo, con poder de convocatoria, y que es un referente para su comunidad.

Su deseo es estar siempre en lo social, trabajando por los derechos de las mujeres y de las personas, con enfoque diferencial.

Por ello la participación social es la vocación, la pasión, la transformación y la inclusión, articulando la sociedad civil con la institucionalidad. Esta brecha es a veces complicada pero muchas y muchos estamos implicadas en ello.

Rosina Martínez Ochoa, de San Bravo Bolívar.  Es muy importante que resaltemos la participación de las mujeres en cada uno de los espacios en el ámbito social, político y privado, ya que es importante mantener la relación de género, la equidad de género y las perspectivas que como mujeres podemos tener. 

Es muy importante para toda la comunidad tener el reconocimiento desde la perspectiva de género, para poder ponernos en el zapato de la otra persona, para poder ver las necesidades explícitas de las mujeres. Por ello nuestro compromiso como lideresas, se resarce la deuda histórica de tener en el olvido a las mujeres, y por ello es fundamental el reconocimiento del trabajo de las mujeres en la sociedad.

En este sentido nuestro trabajo es que se cumplan los Derechos de las Mujeres, reconociendo como sujeto explícito de derechos a las mujeres, tanto en la normativa nacional como internacional.

Las mujeres hemos sido apartadas de los ámbitos, sociales, políticos y privados, y las mujeres lideresas resaltan y restituyen el daño que esto ha provocado, tanto en estigmas y etiquetas.

Nosotras damos a conocer una de nuestras fortaleza que es el ámbito cultural que impregna toda la vida comunitaria, y se refleja en lo político y social. Así se hace necesario participar socialmente para estar en los espacios de toma de decisiones para poder minimizar los riesgos y las vulnerabilidades de nosotras las mujeres, que las conocemos porque las vivimos.

Las mujeres damos la vida

Las mujeres somos grandes.

Las mujeres somos trabajadoras y somos alegres.

Las mujeres enseñamos, y jugamos, y participamos en la sociedad. Somos parte de la sociedad.

Sin nosotras no habrá Paz.

Aguas Ocaña, fue la primera dama en Honduras, ya que se casó con el presidente Ricardo Maduro. Su trabajo se caracterizó por su atención al sistema de protección de la infancia en Honduras. Logró cambiar las conciencias de la sociedad en Honduras ante la grave situación de los niños y las niñas en situación de calle, sin familia.

Aixa Xena es una trabajadora social, activista pro derechos de las mujeres en Marruecos. Se implicó en eliminar el rechazo hacia las mujeres viudas, solteras y mujeres maltratadas, que en la mayoría de los casos se les quitaban a sus hijos e hijas.

Ante esta realidad injusta, decidió crear en 1985 la asociación que defendiera los derechos de estas mujeres y sus hijos. En el camino se encontró con gran parte de la sociedad rechazando la tarea de la asociación, incluso con amenazas de muerte. El trabajo de la asociación se consideraba inmoral.

La finalidad era generar procesos de autonomía de las mujeres, tanto de formación como de trabajo, mientras se ofrece la atención a sus hijas e hijos.

Poco a poco, su tarea y la de la asociación ha ido cambiando la conciencia de la sociedad marroquí, siendo premiada en diferentes países europeos, y finalmente en el 2002 en Marruecos.

Aixa falleció en el 2022, y la asociación Solidaridad Mujer de Marruecos ha continuado su compromiso por la defensa de los Derechos de las Mujeres y los Derechos de la Infancia.

También tenemos mujeres valientes entre nosotras, mujeres que ayudan a otras mujeres y quiero reconocer la ayuda de mi amiga y compañera Zaradasade, que estuvo a mi lado en un momento complicado de mi vida. 

Siempre lo agradeceré.

Concha ha sido mi maestra, y gracias a su trabajo he podido superar dificultades, creer en mi misma, mejorar en los exámenes, y alcanzar mis metas.

Su paciencia y su motivación son sus principales valores, que me ayudaron. Concha tiene mucho carácter, es luchadora, y se pone en tu piel, que te escucha y comprende, sin juzgar. 

Concha es divertida, Concha es ella misma, en definitiva es un modelo a seguir y una fuente de inspiración, para todas aquellas personas que nos hemos cruzado en su camino.

Hebe Bonafine fue una activista argentina y cofundadora de la Asociación Madres de la Plaza de Mayo, que son madres de personas detenidas y desaparecidas durante la última dictadura cívico militar entre 1978 y 1983 en Argentina. 

En esos años las personas desaparecían por el plan de terror, secuestros, torturas, desapariciones forzadas y robo de bebés. Claramente se atentaba contra los derechos humanos, y muchas de las madres de estas personas desaparecidas salieron a la plaza, y comenzaron a protestar pacíficamente.

Hebe tenía 3 hijos, siendo dos de ellos secuestrados, y su mundo de cuidado de la casa y los suyos, cambió, decidiendo participar activamente, abriendo su visión a qué estaba pasando en Argentina, pidiendo respuestas. 

Se creó un colecto común de mujeres, que salían cada jueves, siendo su símbolo el pañuelo blanco en la cabeza. Tuvieron el respaldo de los medios de comunicación extranjeros y su mensaje fue calando a nivel mundial. En Argentina su confrontación pacífica molestaba mucho y sufrieron acoso de todo tipo, pero ellas continuaron.

Claramente es el ejemplo de una mujer que tocó un tema muy profundo y oscuro de la historia, y aprendemos que cada mujer tenemos que luchar pacíficamente por algo en nuestra propia vida, por los derechos que no se tienen, por la voz en la sociedad que no se tiene, por un salario inferior, o simplemente por ser mujer, y todo ello es por la justicia social. 

Por todo ello seguimos luchando para escucharnos más fuerte!!!!